¿Alguna vez, te haz preguntado la razón de tu existencia? o quizás, ¿te hayas
cuestionado el porque de tus vivencias? o ¿Cuál es el verdadero sentido
profundo de la vida? o ¿Quizás la haz mirado fijamente en su centro,
buscándote? ¿ te has reconocido en ella? ¿Haz podido sentir el privilegio que es
habitar esta tierra?
Tomate solo un momento, te invito, a sentirte, a mírate por dentro, abre tus ojos
internos y mira, mira, muy dentro, y siente, solo siente, y escucha, escucha, la
suavidad de los sonidos interiores que abundan en ti, el sonido suave y profundo
del viento, resonando entre las rocas cubiertas de agua y vida que yacen en el
centro de tu ser, si, ese sonido constante presente y rítmico que te inspira, que
te alienta, que te anima y llena de vida.
Ese estadio único y eterno que se hace presente cuando acallamos la mente,
ese lugar eterno e infinito que te conduce al espacio sin tiempo, donde surge y
se expresa el verdadero ser, si , tu verdadero yo, tu esencia, que hace evidente
tu presencia.
Te aseguro, que una vez que lo miras de frente y sin barreras, nunca mas
vuelves a ser el mismo, te transformas en todo y a la vez en nada, tu yo se
diluye, tu ser emerge y tu ser esencial se presenta ante ti, cubierto de un ropaje
tan blanco como la nieve y tan brillante como la luna y sus estrellas, eso si, te
aseguro que una ves mirado, tus ojos se vuelven polvo de estrellas y tu, te
sumerges en el gran universo interior y te pierdes en el infinito mundo de las
sagradas profundidades del alma, para encontrarte con tu yo verdadero, que
yace dormido, esperando tu rose, tu toque conciente, que lo despierte de su
largo sueño inconciente, y que le recuerde y le susurre como el mas grande de
los amantes, su razón de existir, que le haga vibrar y sentir de nuevo el fugas y
eterno momento de la realidad presente de la existencia.
Ese amante que invita, seduce, te envuelve, penetra, sacude y sucumbe a la
pasión del amor, del encuentro, de la fusión, ese lugar sagrado de la unidad ,
donde todo es uno y uno es todo, donde el alma encuentra su sentido y donde el
espíritu expresa la razón de su presencia.
Ese lugar interior secreto, virgen, bello, ese paraíso terrestre, que te espera, que
te anhela, que te llama, ese espacio tan brillante y lucido como el sol, que
espera te manifiestes tal cual y como eres, que no te pide nada a cambio, que
no te condiciona, que no te juzga, que solo te ama, te honra, te mira, directo y de
frente se inclina en reverencia diciéndote:“ eres el milagro del amor” “si eres
el milagro del amor divino manifestado en esta y muchas otras
dimensiones, gracias por tu existencia, y bienvenido seas mi bien amado”
Lo escuchas? Lo sientes? Lo miras? Vibras? Te estremeces? Te despierta? Te
aviva? …te dije…. te dije, que nunca serias el mismo….!Ahora, eres el milagro
del amor viviente!
Ma. Elena Carrión Cuellar
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